La vergüenza es una
sensación de desgracia o condenación; es un sentimiento negativo ya que se
genera del temor de un juicio negativo de los otros sobre uno mismo. Se manifiesta mediante rubor facial,
confusión mental, vista caída, una postura descolocada y cabeza baja. Produce un sufrimiento profundo porque
esta emoción está ligada a las relaciones que tenemos con las demás personas y
con la sociedad en general.
Hay situación que sonrojan, que provocan un tormento íntimo,
una sensación de alarma en el cuerpo. La provocan muchas cosas, por ejemplo, un
trabajo, la sexualidad, la desnudez, la pobreza, la maternidad, las burlas, el
juego, el maltrato y el amor.
La vergüenza es una
respuesta emocional negativa acerca de uno mismo unida a un sentimiento de
humillación que te hace sentir fuera de lo humanamente digno y produce un
sentimiento de ineptitud sobre lo que estamos haciendo. En lo corporal deja
rastros. Si es visible, la persona que lo padece puede sonrojarse con cierta
tirantez muscular alrededor de los ojos. Su energía emocional incrementa el
flujo sanguíneo y esto produce un aumento de la temperatura.
No se trata de una emoción innata sino aprendida a través
del proceso de socialización y mediante las relaciones que tenemos con los
adultos de referencia (habitualmente los padres). Las personas mas proclives
son aquellas que han tenido alguna inhibición psicológica en el momento en que
su personalidad se estaba formando.
Este sentimiento
suele asociarse a dos emociones: * Impotencia: evaluaciones que atacan la
identidad. "No valgo la pena. Todo ha acabado para mi". Nos
sentimos perdidos, sin fuerzas y abandonados a los demás.
* Rabia: a veces nos conduce a formas de recriminación y
venganza.
Generalmente, este
sentimiento se lo intenta esconder y la persona se transforma en alguien rígido,
aislado, que no habla o lo hace con timidez (como pidiendo permiso). También
puede tener contracciones físicas, palidez, sudoración fría, y mirada lejana y
evitativa.
No todos sentimos vergüenza
ante las mismas cosas. Por ejemplo: para varias mujeres esta bien visto ser
madre soltera, para otras no; para algunas personas esta bien hablar libremente
de sexualidad y contar las experiencias, en cambio para otros eso no esta bien
visto.
No hay que negar que a veces tenemos vergüenza, ya sea por
una sociedad demasiado demandante de cualidades y virtudes físicas e
intelectuales, ya sea por las exigencias o por la educación de nuestros padres
o ya sea porque nosotros mismos nos complicamos la vida con valores e intereses
demasiado inalcanzables.