sábado, 3 de octubre de 2015

ESA SUPERVIVENCIA CONSTANTE



Un nuevo amanecer, con pequeñas cosas para realizar.
Desayuno, música y pc por un rato. Si se puede, a caminar varias vueltas alrededor de la plaza. Leer, quehaceres del hogar, buscar trabajo, almuerzo, merienda y cena. Un poco de televisión y de estudio.
Ayudar al que esté en casa. Algún llamado telefónico.
Y así otro día que se va. Otra rutina mas. De lunes a lunes es esta monotonía, porque para mi no existe diferencia alguna entre los días de semanas, fines de semanas y feriados. Son días iguales, sin sentido, aplastada en la rutina y en quehaceres.
Llega la noche con su soledad, su silencio, con la luna y la almohada de compañía hasta que venza el sueño y el cansancio. Si que estoy agotada. Estar en esta situación cansa, desgasta, hay mucho sacrificio, soledad, martirio y lucha constante.
La resiliencia es la capacidad que tiene una persona para seguir proyectando el futuro, para enfrentar situaciones que lo hayan puesto en riesgo psicofísico. En ocasiones, las circunstancias difíciles o los traumas permiten desarrollar recursos que se encontraban latentes y que el individuo desconocía hasta el momento. Puede ser una enfermedad, abuso sexual, desastres naturales (por ejemplo, inundaciones y terremotos), la prisión y la desocupación.
Para esto no hay ni edad ni género ni sexo. Influye mucho el pasado y quienes ayudan durante el proceso  como lo resolvieron.
El individuo está expuesto a la adversidad, enfrentarse a vivencias traumáticas, superar el daño sufrido e intentar obtener una respuesta para sí mismo. Es decir, como seguir sujeto a la vida cuando sucede lo inesperado. Esto puede generar distintas expresiones simbólicas. Podría haber creatividad a través de la escritura o una afición artística.
Se pueden tener diferentes posturas frente a la adversidad: la creativa, la reivindicativa, la reparatoria que busca hallar un bien para la comunidad y el humor. Ante la tragedia cada uno reacciona de alguna manera.
Las personas responden de manera diferentes a las tragedias. Pero, ¿por qué sucede esto? ¿Por qué algunos se enferman o mueren? A veces se puede salir adelante, otras no. La resilencia está en la posibilidad del naufragio de saltar de la embarcación para salvarse. Influyen los factores psíquicos, mandatos culturales, ideológicos, sociales y el lazo social que evitan el desmoronamiento de individuo. La persona resiliente lucha por seguir avanzando en la vida a pesar de lo sucedido.
La mayoría no elegimos lo que nos pasa, pero si se puede enfrentarlo. A veces ayuda aferrarse al para que; otras no. Muchas veces no se puede volver atrás. No puedo dejar de involucrarme con las personas que están mal.
Creo formar parte de las personas reisilentes. Soy una sobreviviente de la vida en sí, de la lucha constante, una buscadora nata. Ojalá alguien me ayudara a sobreponerme, ojalá pudiese revertir mis traumas y transformarlo en algo positivo. Quisiera aferrarme a la vida, pero no puedo. Aunque no se para que lo hago, ya que llevo años buscando estabilidad económica, perfeccionando mis conocimientos y querer crecer como persona, pero nada de esto sucede. No se hasta cuando seguiré en esta supervivencia, ya que no tolero esta situación que me aqueja desde los 20 años (sin contar las malas cosas que pasaron en mi infancia). Tomo a partir de los 20 años, porque ya terminé el secundario y no dependo de alguien para hacer algo.
Resistir, resurgir y amigarse con la vida. La única que me persigue es la primera opción, las otras están en un cajón.
Algunas personas nacen con suerte, otras nacemos estrelladas.